Cada vez más empresas se certifican como B Corp y forman parte de este selecto grupo de organizaciones sostenibles. B Corp se ha convertido en una de las certificaciones más demandadas por aquellas empresas que quieren trabajar su estrategia de responsabilidad social corporativa en el día a día y convertirse en referentes de su sector.
En un momento en el que la importancia de la sostenibilidad en las empresas medianas y pequeñas es más evidente que nunca, B Corp permite crear sinergias y significarse como un actor fundamental en el próximo ecosistema empresarial.
Las empresas B Corp representan una nueva manera de equilibrar el desarrollo económico con la responsabilidad medioambiental y con el medio, logrando un impacto positivo en el entorno más inmediato y en el planeta.
Este tipo de organizaciones forman parte de un selecto grupo de empresas sostenibles, que son capaces de atraer al mejor talento y hacer que sus trabajadores se sientan orgullosos, al demostrar que otra manera de hacer las cosas es posible.
Solo las empresas que demuestren que cumplen un desempeño sostenible y acorde a los Objetivos del Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030 pueden formar parte de este selecto club.
¿Qué es B Corp?

B Corp es una certificación de sostenibilidad que muestra el compromiso en la política de responsabilidad social corporativa de la organización. Con los Objetivos de Desarrollo Sostenible u ODS como gran referente, garantiza que la empresa es parte activa del cambio social para un mundo más justo, respetuoso con el medio ambiente y sustentable.
La certificación B Corp busca organizaciones que transformen lo que significa hacer y ser empresa. Más allá del beneficio económico, son organizaciones centradas en generar un valor añadido fundamental en los tiempos que corren: el valor social, ambiental y, no menos importante, económico, repartido en todos sus “agentes de interés”.
Dentro de esta categoría de agentes de interés se encuentran los accionistas, clientes y trabajadores, pero se va un paso más allá, incluyendo también a los proveedores, las comunidades locales y el medio ambiente.
Ser parte de la comunidad B Corp implica un claro compromiso empresarial. Se trata de aplicar la influencia y la fuerza de la misma para generar un impacto positivo tanto en las personas como en el planeta.
Para ello, hay que trabajar activamente en frenar la desigualdad y la pobreza, empezando por los propios puestos de trabajo, que deben ser de alta calidad y aportar dignidad al empleado. También se busca fortalecer las comunidades y cuidar el medio ambiente.
Según su Declaración de Interdependencia, los puntos clave que definen las empresas B Corp son:
- Que debemos ser el cambio que queremos ver en el mundo;
- Que todas las empresas deben guiarse teniendo en cuenta la importancia de las personas y el planeta;
- Que a través de sus productos, prácticas y beneficios económicos, las empresas deben aspirar no sólo a no hacer daño, sino sobre todo a generar un beneficio social y ambiental;
- Para hacer esto, es necesario que actuemos comprendiendo que dependemos el uno del otro y que, por lo tanto, somos responsables de nosotros mismos, de los demás y de las futuras generaciones.
Estas empresas certificadas con un importante Compromiso RSE vislumbran un nuevo futuro en la economía. Un futuro en el que, globalmente, se utiliza a las empresas como una fuerza para el bien.
Movimiento B

Cada vez hay más empresas certificadas B Corp y juntas han formado el llamado Movimiento B Corp. Este movimiento tiene su reflejo en diferentes aspectos, ya que el trabajo por el cambio a un mundo mejor debe ser global para que sea efectivo.
Se busca conseguir una economía más equitativa e inclusiva, que sea regenerativa para las personas y el planeta y no suponga hipotecar nuestro futuro. Para ello, se intenta involucrar a todos los actores de la sociedad, desde los ciudadanos de a pie hasta líderes políticos y empresariales, pasando por grandes inversores o trabajadores.
Cada uno de ellos debe comprender cuál es su rol en esta nueva economía, buscando un nuevo capitalismo más responsable, donde las empresas pueden ser protagonistas de la solución y no la causa del problema.
Se busca ir más allá de la memoria de sostenibilidad de la empresa, y tener un impacto realmente significativo en el entorno. No es solo alcanzar el Net Zero, es entender por qué alcanzamos el Net Zero y por qué el resto de las empresas deberían alcanzarlo también.
Impacto Político
Una de las claves del trabajo de B Corp tiene que ver con el impacto político. No solo se trata de mejorar desde la empresa, sino también de forzar a las administraciones públicas a elaborar políticas que tengan en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sostenible u ODS.
De hecho, de la mano de la Organización de Naciones Unidas, B Corp ha desarrollado una plataforma de gestión online y gratuita, llamada ODS Action Manager, que parte de su propia Evaluación de Impacto B (EIB), y permite evaluar y mejorar su impacto a través del desempeño en estos objetivos.
Además, también se realizan iniciativas a nivel nacional y en el ámbito de la Unión Europea. Por ejemplo, a nivel nacional se ha trabajado para conseguir una ley para empresas con propósito. Estas empresas entrarían dentro de una nueva entidad jurídica denominada Sociedades de Beneficio e Interés Común (SBIC), para promover y reconocer a las empresas que apuestan por la sostenibilidad.
Por otra parte, a nivel europeo, B Corp forma parte de la Interdependence Coalition, que trabaja por conseguir que cada empresa en la UE tome consciencia de su impacto social y medioambiental y sea responsable de construir un mundo mejor.
Cuando hablamos de ser B Corp, no se trata de una etiqueta vacía, se trata de formar parte de un grupo que realmente están cambiando las cosas, tanto a nivel empresarial como en lo legislativo.
Comunidades B
Más allá de lo político, las B Corp también ven reflejada su filosofía en las comunidades autónomas. Actualmente, están trabajando empresas B Corp de forma voluntaria junto a otros agentes de cambio comprometidos con hacer del mundo un lugar mejor.
Por medio del programa de Comunidades B, estos actores se alían y “conectan y sensibilizan al ecosistema local, fortaleciéndolo para la transición hacia una economía de impacto”. Actualmente, las Comunidades B están activas en la Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Cataluña y Andalucía.
Esta alianza también lo vemos en lo local. En este caso, con un proyecto piloto en Barcelona, convertida en Barcelona + B. En realidad, se trata de una iniciativa que nació en América Latina, donde ciudades como Santiago de Chile, Río de Janeiro, Mendoza o Asunción ya forman parte de la red.
También está comenzando a desarrollarse en Europa, con Edimburgo siguiendo la estela de Barcelona, en lo que es un movimiento internacional imparable.
Ser una ciudad B supone apostar por la transformación empresarial y por una alianza entre los diferentes actores de la ciudad: universidades, administraciones públicas, organizaciones sin ánimo de lucro, fundaciones, empresas y otros colectivos. Juntos, trabajan por lograr estos Objetivos de Desarrollo Sostenible, cada uno con sus propias hojas de ruta, pero colaborando entre sí y creando sinergias.
Y es que ser una empresa B Corp es formar parte de un ecosistema de algo mucho más grande que ha llegado para transformar el mundo por completo.
Evaluación de Impacto B

Para poder convertirse en una empresa B Corp hay que pasar la Evaluación de Impacto B (EIB). Se trata de una evaluación del desempeño con diferentes preguntas sobre las prácticas que realiza la compañía en lo referente a los diecisiete objetivos de desarrollo sostenible.
Para poder formar parte de la comunidad B Corp es necesario tener una puntuación de al menos 80 sobre 100 en la Evaluación de Impacto B. Esta puntuación es verificada posteriormente por auditores independientes. Si la puntuación superior es real, se podrá formar parte de este club exclusivo.
Para ello, hay que pagar una cuota anual, que oscila entre los 500€ y los 50.000€ y depende de los ingresos anuales de la compañía. Así, cada empresa aporta a la comunidad en función de sus posibilidades para seguir creando un cambio positivo en el entorno.
Por supuesto, no es un cheque en blanco. Cada tres años se realiza una reevaluación para asegurarse que el compromiso sigue siendo el mismo. Un buen momento para realizar nuevas mejoras como la transición ecológica a cloud o la reducción de la huella de carbono en la empresa.
En total, más de 190.000 empresas de todo el mundo han utilizado la Evaluación de Impacto B para medir y gestionar su impacto social y ambiental. El uso de la herramienta online en sí es gratuito y los datos completamente confidenciales.
Así, se convierte en una herramienta muy útil para saber cuál es nuestro rendimiento, aun si no estamos preparados para dar el salto y significarnos como un actor a tener en cuenta en la sostenibilidad empresarial.
En Connecting Visions podemos ayudarte a conseguir la certificación B Corp. Contamos con impulsores del movimiento B Corp con altos niveles de especialización que te ayudarán a conseguir tu sello.